domingo, 30 de enero de 2011

Capaz


Todo el mundo puede conseguir lo que se propone.

Incluso a veces las manos más pequeñas logran conseguir las cosas más grandes.

Hay razones para creer en un mundo mejor.

Basta una sonrisa como estas...
www.youtube.com/watch?v=fiE8KbqQsf8

domingo, 23 de enero de 2011

Corre


Experimenta,crea,imagina,olvida,perdona,sueña,escucha,inventa,escribe,lee,canta,baila,respira,ríe,besa,juega,gana,pierde,innova,grita,cree,confía,salta,vive y sal corriendo si te viene en gana. En la vida hay momentos en los que tu defines el momento o el momento te define.
Tú decides.

domingo, 2 de enero de 2011

Dependencia bendita,invisible cadena que me ata a la vida..


En muchas ocasiones el ser humano puede llegar a depender de una persona. ¿Qué significa esto? Depender, anteponer, atar. Es difícil. Es difícil además por muchas cosas. Lo primero es que te cuesta infinidad reconocerlo. Normalmente empezamos a depender de alguien cuando cogemos cariño, mucho cariño, demasiado cariño y finalmente todo lo relacionamos con él/ella, pero no somos conscientes de ello hasta que alguien nos lo dice o nosotros mismos nos damos cuenta abriendo un poco más los ojos (de está última se escasea). Empezamos a depender de alguien cuando te planteas como sería tu vida sin esa persona, y acabas haciendote creer a ti mismo que no puedes pasar un día sin saber simplemente que está bien. Tu estado de ánimo varía según como te trate, como se muestre contigo, así será como tu te muestres con los demás. Visto desde fuera todo esto no influye más que en aspectos negativos, pero el sujeto que lo vive por dentro se siente cómodo con esta identidad, teniendo a alguien tan especial como lo puede llegar a ser y por mucho que en algún momento pueda notar esta dependencia no querría cambiarlo por nada de el mundo.
Es como estar en una cárcel, pero una cárcel en la que te dan de comer, te pasan todos los días un libro que te gusta y tienes un compañero de celda la mar de simpático y divertido, finalmente no quieres huir.
Cuando cumples la condena y te liberan, te das cuenta que lo que hay a fuera es incluso mejor, todo lo que ya no recordabas porque había perdido su importancia reaparece en tu vida. Recuperas esa comodidad.En algún momento puedes extrañar esa única relación tan intensa,incluso echas de menos estar atado a alguien, darle una mayor importancia que al resto de la gente, ignorar el resto de problemas y que todo se reduzca a una sola cosa, a una sola persona, pero es entonces cuando tu solo caes, en que, cada persona es especial a su modo,y cada trocito del mundo y cada momento vivido es tan intenso como tu quieres que sea y que tu , y tu propia independencia, es todo lo que necesitas para sobrevivir.
''Porque nadie puede saber por ti.Nadie puede crecer por ti.Nadie puede buscar por ti.Nadie puede hacer por ti lo que tú mismo debes hacer.La existencia no admite representantes.'' (Jorge Bucay)

sábado, 1 de enero de 2011

año año año año


Metemos nuestro anillo de compromiso dentro de una copa de sidra deseando mantener la relación con tu pareja durante los siguientes días de tu nuevo año. Nos ponemos prendas rojas, cualquier cosa, esperando encontrar así la suerte en los 365 días de este año. Nos tomamos las doce uvas en las respectivas doce campanadas, como tradición, pensando que de algún modo nos ayudará en adelante para el resto de este año. Brindamos por seguir juntos otro año más, por compartir otro año sin que falte nadie. Pedimos más paga para unos caprichitos, adelgazar un par de kilos y mantenerlos, pedimos dejar de fumar, encontrar un buen amor y por qué no un poquito más de salud, que nunca está de más.
Alguien me dijo que las cosas hay que pedirlas poco a poco, año por año. A la larga los deseos no se conceden, se olvidan se pierden o se extravían. La verdad es que si tuviera que elegir, pediría solamente una vez en la vida algo que fuera para siempre, sin tener que pensar en propósitos ni metas nuevas, algo que cubriese todas mis expectativas, algo de lo que jamás nadie se harta y lo que tantas y tantas personas van buscando por la calle día tras día porque se les olvidó apuntarlo en la carta para los Reyes Magos, ¿sabéis de qué os hablo ya? Entonces es que vosotros tampoco la habéis pedido.


FELICIDAD, señores, pura y dura. No hay más.