"Las personas desgastan los días buscando algo. Buscando un estado de paz interior que haga disminuir el caos que aparentan, que disimule el ansia de vivir lo que aún no han vivido. El error se apoya en que consolidamos el fin de la búsqueda en otro. En cualquiera que nos haga sentir que todavía tenemos tiempo para perder la cabeza y quitarnos los zapatos.
¿Cuándo nos garantizamos que nuestros propios deseos y emociones pertenecían a alguien que todavía está por conocer? ¿En qué momento le vendimos nuestros sueňos a alguien?
Las personas recorren su vida idealizando el amor, el dinero, la felicidad, incluso la suerte... Poniéndole peso y precio a las ganas y al deseo. Materializando el magnetismo, la química, la casualidad, la magia...
En definitiva; las personas se deslizan por la vida buscando personas. Alegando esa tontería de que tiempo y corazón están divididos en dos.
Las personas buscan personas y acaban encontrando sólo gente contra la que cruzarse a la decepción.
Me gustaría que de vez en cuando, alguien tuviese el valor de preguntarse a si mismo. Me resultaría interesante que hubiese más gente jugándose la vida por conocerse.
A fin de cuentas me gustaría que supieseis que desde luego, para mí, nadie baila como yo mi canción favorita."